En noviembre fue invitada por la profesora Isaura Mourão, de la Universidade Federal de Viçosa, Brasil, para una ponencia en línea seguida de una charla sobre «El futuro del trabajo: retos y oportunidades». Este evento, enmarcado en la asignatura “Proyecto de Extensión – Periódico Laboratorio”, estuvo dirigido principalmente a estudiantes del curso de Comunicación/Periodismo, aunque también participaron estudiantes de asignaturas como «Comunicación Organizacional» y «Marketing en Contextos Digitales».
Esta invitación representó una valiosa oportunidad para reflexionar sobre un tema de gran relevancia. De este modo, abordamos cómo las transformaciones en el mundo laboral no solo afectan a los futuros profesionales de la Generación Alfa, sino también a la Generación T, que nos incluye a todos.
La evolución del trabajo a lo largo de las generaciones
Para enriquecer el debate, desarrollé el tema “El futuro del trabajo: desafíos y oportunidades”, destacando, obviamente, el impacto de la inteligencia artificial (IA). Comencé con un recorrido por la evolución del trabajo a través de distintas generaciones, que permitió contextualizar el presente y proyectar escenarios futuros:
- Baby Boomers (1946-1964): enfoque en la estabilidad, lealtad a las empresas y estructuras jerárquicas rígidas.
- Generación X (1965-1980): introducción de la flexibilidad laboral y el impacto de la globalización, junto con la aparición de las primeras tecnologías digitales.
- Generación Y/Millennials (1981-1996): búsqueda del equilibrio entre vida personal y trabajo, con una amplia aceptación del trabajo remoto y las tecnologías digitales.
- Generación Z/Centennials (1997-2012): valoración de la flexibilidad y el impacto social, con una gran adaptabilidad a las nuevas herramientas tecnológicas.
- Generación Alfa (2013 en adelante): crecimiento en un entorno digital, con el uso temprano de IA y una expectativa de personalización en el trabajo.
- Generación T (actual): la GenT, o Generación de la Transición, como la describe Amy Webb en su ponencia en el SXSW este año. Según Webb, en lugar de mantener la división entre las generaciones X, Y, Z y Alfa, la humanidad debe entenderse ahora como una sola generación, unida por la profunda transformación tecnológica que está enfrentando y que continuará en el futuro.
El futuro del trabajo y el papel de la IA
Cabe destacar que las relaciones laborales están experimentando transformaciones profundas, impulsadas por la digitalización y el trabajo remoto. Los modelos híbridos se han vuelto comunes, ofreciendo flexibilidad pero también exigiendo cambios en la cultura organizacional y la comunicación.
En este contexto, la inteligencia artificial desempeña un papel central. Está redefiniendo tareas, reemplazando funciones tradicionales y generando nuevas oportunidades. Herramientas innovadoras, como ChatGPT y MidJourney, permiten realizar el trabajo de manera más rápida y eficiente. Sin embargo, esta evolución acelerada también plantea desafíos, como el temor a la sustitución de empleos. Por ello, es fundamental que los profesionales desarrollen habilidades clave, como el pensamiento crítico, el análisis profundo y la capacidad de utilizar estas tecnologías de forma ética y estratégica.
Tendencias emergentes y el futuro del trabajo
Por lo tanto, el mercado laboral está siendo moldeado por tendencias como:
- IA: la redifinición del trabajo a través de la inteligencia artificial
- Economía Gig: aumento de freelancers y trabajos temporales facilitados por plataformas como Upwork, Fiverr y Workana.
- Recapacitación constante: la necesidad de adquirir nuevas habilidades crece con la evolución tecnológica. Ejemplos incluyen programas como Lifelong Learning y cursos de IA del Senai (en Brasil) o Barcelona Activa/Cibernarium (en España).
- Trabajo remoto descentralizado: muchos profesionales han migrado de grandes centros urbanos a ciudades más pequeñas, colaborando virtualmente con empresas globales.
- Diversidad, Equidad e Inclusión (DEI): los equipos diversos tienen un impacto comprobado en la innovación.
- Sostenibilidad y Responsabilidad Social Corporativa (RSC): las empresas alineadas con valores ambientales y sociales son más atractivas.
Retos en el futuro del trabajo con la IA
La inteligencia artificial (IA) enfrenta desafíos significativos, como la falta de responsabilidad y la introducción de sesgos en los modelos a gran escala. Con el avance hacia modelos más sofisticados, como los Large Action Models (LAMs), la IA será capaz de interpretar intenciones humanas basándose en datos extraídos de comportamientos, emociones y acciones cotidianas. Estos avances, combinados con dispositivos conectados como el Apple Vision Pro, crean un ecosistema donde sensores interconectados pueden identificar movimientos antes de que sean percibidos por los usuarios.
Además, la inteligencia organoide (OI) surge como una nueva frontera, combinando información biológica con sistemas de IA para desarrollar computadoras biológicas más rápidas, eficaces e hiperpersonalizadas. Este futuro hiperconectado requiere una preparación ética y estratégica.
Oportunidades en el futuro del trabajo con la IA
En consecuencia de este nuevo escenario, es fundamental mapear redes de valor, identificar los sectores y profesiones más afectados, y diseñar planes que garanticen una adaptación suave e inclusiva a los cambios. Del mismo modo, para garantizar esa transición, surgen nuevas oportunidades para profesionales en áreas como:
- Ética y auditoría de IA: especialistas en ética tecnológica y diseñadores de algoritmos responsables.
- Ciberseguridad y análisis de datos: especialistas que protegen y gestionan los datos masivos sobre el comportamiento humano.
- Ingeniería biotecnológica: materiales biotecnológicos, bioinformática y diseño de sistemas híbridos que integren IA y principios biológicos.
- Reclutamiento y gestión basados en IA: análisis impulsados por datos que harán los procesos de RR. HH. más eficientes y efectivos.
- Programas de Salud Mental y Bienestar: esenciales para mantener una fuerza laboral saludable y productiva.
Además, habilidades interpersonales como la inteligencia emocional y la adaptabilidad son cada vez más valoradas en un mercado dinámico.
La inteligencia artificial en la educación
En el ámbito educativo, la IA ya está siendo utilizada para capacitar a profesionales y fomentar la innovación. Un ejemplo inspirador es la enseñanza para niños en el Colegio Montserrat, Barcelona, donde los docentes integran plataformas como Copilot para enseñar redacción y creación de prompts a la vez. El niño escribe una descripción de su propio rostro, el profesor la corrige y transforma el texto en un prompt para generar una imagen digital de su cara. Así, aprende a redactar y usar IA al mismo tiempo.
Otro ejemplo son las clases de matemáticas para adolescentes basadas en obras de arte cubistas, también en el Colegio Montserrat, que integran el arte y las matemáticas a través de la IA. Tal como explica la profesora Olga Casaban, los alumnos han aprendido a trabajar con el cálculo de PI y otras tareas a través de una obra de la artista plástica Sonia Delaunay. Ambos ejemplos se pueden ver en el webinar de Founderz. En definitva, las posibilidades son infinitas, dependiendo de la creatividad y responsabilidad en el uso de la tecnología.
Optimismo cauteloso
En resumen, fue gratificante escuchar las inquietudes de los estudiantes durante mi ponencia «El futuro del trabajo: retos y oportunidades», y poder aportar orientaciones desde mi perspectiva como Comunicadora y Socióloga. El futuro del trabajo plantea grandes desafíos, pero también innumerables oportunidades para quienes están dispuestos a aprender, adaptarse y alinear sus elecciones con sus valores y propósitos. Es importante mantener el optimismo, pero un optimismo cauteloso.
Pronto compartiré aquí el enlace para acceder al video de la ponencia y a la charla con los estudiantes. También incluyo enlace al certificado de mi participación como ponente en la Universidad Federal de Viçosa, Brasil. Gracias, Isaura, por la invitación y a todos los alumnos que asistieron la ponencia y participaron en la charla.
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